Cómo curar la “juntitis” en nuestros equipos
Actualizado: 14 jul 2022

De pronto nos encontramos en un mar de reuniones, tal vez más que cuando todo el equipo estaba junto en la oficina.
Estás a media reunión preguntándote ¿Por qué me invitaron a esta reunión?, peor aún, al terminar, en la cabeza de todos ronda un: “Esto pudo haber sido un correo” :(
Este es el problema, imagina que tu lugar de trabajo fuera en la sala de reuniones, ¿A cuántas juntas no estaría tentado tu jefe o equipo a invitarte a estar presente?
Ahora las reuniones son en nuestras computadoras, y siempre (que trabajamos) estamos ahí, por eso es tentador pensar: “No le caería mal escuchar sobre esto”, “al cabo sólo es conectarse”. En la virtualidad, nos vemos tentados a querer que todos estén presentes, porque es fácil que estén.
Pues dejemos de tener reuniones y que todo sean informes, ¡No! la realidad es que sin las reuniones, las organizaciones estamos perdidas, son espacios de comunicación directa y eficaz, facilitan la colaboración, la creación de soluciones, incluso nos permiten fortalecer la cultura de nuestra organización. En general, no odiamos las juntas, odiamos la juntitis, cuando éstas son excesivas, inútiles, desenfocadas o que no nos llevan a donde queremos.